domingo, 10 de septiembre de 2017

7 pasos para preparar un viaje desde 0.

¿Quieres preparar un viaje por tu cuenta y no sabes ni por dónde empezar? En esta entrada voy a enumerar los pasos que puedes seguir para preparar tu viaje ya sea largo o corto.


1. Escoge el destino: lo primero que hay que decidir es a donde vamos a ir. Mi consejo es que penséis un presupuesto para el desplazamiento y después que hagáis una búsqueda general en skycanner. Ordenad los vuelos por precio en el mes o días concretos que vayáis a viajar. Aunque los precios no sean los definitivos os servirán para descartar lugares y seleccionar otros. 

2. Investigad el coste de la vida en los lugares que hayáis seleccionado, en páginas como ésta: imaginad que tenéis un presupuesto ajustado, o bien que queréis hacer el viaje más barato posible, el vuelo es baratísimo, pero si el coste de la vida allí es alto no os compensará. Como ejemplo práctico: desde España un vuelo a Mallorca es muy barato, imaginad que tenéis 20 días de vacaciones, el costo de la vida allí en temporada alta es muy caro, por lo que quizá gastéis lo mismo yendo a Mallorca, que a una isla Tailandesa. El vuelo y es costo de la vida (hoteles, transportes, comida...) deben calcularse juntos. 

3. ¿Qué voy a visitar?: una vez hayáis escogido el lugar os recomiendo que hagáis una lista de aquellos lugares que os gustaría visitar, para hacerla servios de guías de viaje (no las compreis! Id a vuestra Biblioteca más cercana y mirad varias, aunque estén obsoletas en cuanto a Hoteles o transportes, los lugares para visitar serán los mismos que hace 10 años). Después os recomiendo consultad blogs o webs del estilo: las mejores playas de Fiji, o 5 cosas que hacer en Florencia. La lista debe ser en plan "lluvia de ideas", vale todo: restaurantes, playas, paisajes, museos, monumentos... mientras más variada sea mejor. 

4. Itinerario: Aquí te recomiendo imprimir o "dibujar" un mapa del lugar de destino e ir poniendo tu selección de todo lo que más te gustaría visitar en él. Cuando acabes te darás cuenta de qué lugares debes incluir en tu itinerario sí o sí, y de que lugares debes descartar porque queda demasiado lejos o porque no vale la pena ir hasta allí para eso. 
Calcula las distancias: una vez sabes qué lugares te gustaría visitar y dónde están localizados toca reducirlos o ampliarlos según nuestro tiempo, para esto google maps es la caña. Calcula las distancias y el costo de los desplazamientos y mira si se amoldan a tu tiempo. ¿Tienes 15 días para viajar a India y quieres recorrerte 20 ciudades? No cuadra, debes dejar mínimo 3 días por ciudad para no pasar más tiempo en camino que en el lugar, además poder establecerse en un "hotel" da tranquilidad, estar todo el tiempo de arriba abajo se puede hacer muy estresante y tu viaje puede perder su esencia positiva. Escoge 3, 4 ciudades conócelas y ve más relajado. El mismo consejo si solo viajáis 3 días por un lugar, es mejor que hagáis poco y bien, que poder decir "he estado en 20 lugares" pero ahora mismo lo confundo todo porque no pude interiorizar nada. 

5. Rehaz: ya sabes tu itinerario y ya has calculado mínimamente las distancias, ahora es el momento de ser más "concreto". Quieres ir a visitar un museo y ¿te has desplazado hasta el centro de la ciudad? busca actividades, restaurantes, lugares de compra... que se hagan cerca de allí. Ahora la búsqueda no será "7 días en Barcelona", sino "Qué hacer cerca de la Sagrada Família". Quizá no te interese nada de lo que está cerca a un lugar que sí o sí querías visitar, pero a veces te llevas sorpresas agradables de "actividades" que sí te interesan pero que normalmente una guía genérica no contempla. Piensa siempre en la variedad, si vas a ir a Bangkok no es necesario que veas 300 templos cada día: hay mercadillos, parques al aire libre, museos, centros comerciales, torres elevadas, incluso parques de atracciones que ni se te había ocurrido contemplar... escoge según tus intereses y no según lo que la guía diga que debes hacer, e intenta variar, por mucho que te gusten los centros comerciales con ver uno o dos tienes suficiente, no hace falta ver los 20 que hay en la ciudad: te saturarás y tu viaje perderá encanto. Las guías suelen pecar de centrarse especialmente en lugares culturales que va muy bien para hacer el esqueleto de nuestro viaje y que deberías complementar con webs como tripadvisor que separa de antemano sus visitas por "aire libre", "museos", "ocio", "restaurantes"... 

6. Después solo queda encajar las piezas: ¿te gustaba mucho un restaurante y en tu mapa dice que está cerca de aquel museo que querías ir a ver? Has matado dos pájaros de un tiro. ¿Aquel mercadillo que recomiendan todas las guías queda aislado de todos tus demás puntos de interés? Piensa en descartarlo o busca una alternativa similar cerca de uno de tus puntos de interés. Recuerda que en ningún viaje que hagas, por mucho tiempo que le dediques, nunca vas a poder verlo todo: acepta esto cuanto antes y recuerda que tu viaje será mucho más placentero si haces poco y bien que no si hacer mucho y luego no recuerdas ni donde has estado -de hecho creo que ese es el peligro de los viajes guiados, que si no lo planeas tu, no sabes ni dónde estas-.

7. Yo soy meticulosa en llevar bastante planeado el itinerario, me gusta tanto investigar sobre mi destino y me emociona tanto conocer qué voy a visitar, que planear el viaje se me hace tan emocionante como llevarlo a cabo, siempre digo que mi viaje no empieza cuando subo al avión, sino cuando decido llevar a cabo un viaje, porque en la experiencia de planear aprendes también muchísimo acerca del país, de su geografía, de su cultura, de las experiencias que los demás han tenido y que cuentan en sus blogs... cosa que no significa que cumpla mi itinerario a rajatabla, de hecho siempre apunto varias alternativas  por si sobra tiempo, por si no estamos demasiado cansados o si el lugar que quería visitar está cerrado, o completo... y por la misma regla de tres también dejo espacios en blanco por si alguna actividad se alarga, algún transporte no funciona o algún lugar me conquista tanto que le quiero dedicar más tiempo del que pensaba. Está muy bien visitar lugares y encontrarte con sorpresas que no habías planeado, pero si tienes un mínimo conocimiento del lugar que vas a visitar es más difícil que cosas maravillosas se te pasen por alto. 

"Tu viaje empieza cuando decides llevarlo a cabo, 
y no acaba hasta que lo olvidas."
Jennifer Romero Calero

viernes, 14 de julio de 2017

Pisa




Salimos de Barcelona a las 20.40 con la compañía de bajo coste Vueling. 

Llegamos a Pisa a las 21.45. El aeropuerto de Pisa es minúsculo, por lo que nada más salir por la única puerta que hay puedes ver el servicio de bus llamado Lam Rossa que conecta el aeropuerto con el centro de Pisa y muchos otros lugares, uno de ellos es la estación central de trenes, desde donde al día siguiente cogeríamos el tren a Florencia, por lo que nuestro alojamiento cerca de la estación. 
Sin embargo, Pisa es pequeña, y la estación de trenes y el aeropuerto están muy cerca. 



El bus Lam rossa cuesta 1,20€ el trayecto de 70 minutos si lo coges en un puesto cercano de venta de billetes que está dentro del propio aeropuerto. 



Vigilad porque fuera, justo en la parada hay una máquina que se tragó 2 euros nuestros porque no funcionaba y parece que no era una avería sino que no funciona nunca. Si coges el billete directamente en el bus el precio sube a 2€. Hay otras tarifas que dejo a continuación (2017):


Siendo de noche, valió la pena coger el bus hasta nuestro alojamiento que nos dejó prácticamente enfrente, en la parada de la estación central. Si tu destino es la zona de la Torre de Pisa entonces tu parada es Via Cammeo/Piazza Manin nº 4 (TORRE).

Respecto al alojamiento reservamos desde España el Pisa Rooms for Rent, un alojamiento muy cercano y económico cercano a la estación de trenes. 






El Pisa Rooms for Rent es más bien un piso en el que alquilan habitaciones, nosotros cuando llegamos tuvimos que llamar a la propietaria que en 5 min estaba allí. Nos dio las llaves de la habitación y del piso y nos dijo que cuando nos fueramos al día siguiente dejásemos las llaves en la habitación. Así de simple. Por algún motivo la habitación tenía una cama de matrimonio y una pequeña que no usamos. 
El baño, bastante grande, es comunitario, pero ya os digo que allí no había nadie más que nosotros, que casi ni lo pisamos porque llegamos a las 11 de la noche ya duchados, y nos fuimos de la habitación a las 8 de la mañana del día siguiente. 

Nuestro plan fue ver Pisa en una mañana y coger el tren hacia Florencia que era nuestro objetivo real. Lo hicimos así porque volar a Florencia es bastante más caro, aprovechábamos para ver Pisa que es uno de las excursiones que se suelen hacer desde Florencia. Como aterrizamos en Pisa nos ahorramos la ida y vuelta de la excursión y solo pagamos el billete hacia Florencia. 

Para ir a la Torre de Pisa desde nuestro alojamiento teníamos dos opciones: 
o bien volver a coger el Lam Rossa que en unos minutos nos dejaría en la Torre, o bien andar hasta la Torre y ver la ciudad a pie recorriendo los casi 2km que hay de un punto a otro.


 Como la Torre no abre hasta las 9.00 y teníamos que buscar algún lugar donde desayunar decidimos ir andando y conocer un poco la ciudad, y os lo recomiendo encarecidamente: encontramos mercados de flores locales, callejuelas donde comprar recuerdos más baratos que en la propia Torre, pastelerías con una pinta estupenda y rincones...



Una vez lleguéis a la Torre de Pisa, que personalmente me impactó mucho verla, porque en toda la caminata hacia ella no se ve en ningún momento, y de golpe la ves salir entre los edificios y realmente ves la inclinación mucho más acentuada así, con la referencia de las casas que cuando estas en el recinto que no hay tanto con qué comparar. 


Una vez en el recinto de la Torre no hay pérdida, todo está muy a mano. Nosotros subimos a la torre sin reserva previa y siendo Semana Santa nos sorprendimos de la poca gente que había, también pensad que eran las 9 de la mañana y los visitantes que vienen de Florencia o en excursiones supongo que llegan más tarde. Por lo que me reitero en la buena idea de si se va a visitar Pisa aterrizar desde Barcelona a Pisa directamente: ahorras viajes, ahorras dinero en los vuelos, te ahorras reservas anticipadas en Pisa, ves el recinto con más tranquilidad...

Nos costó visitar todo el recinto, subir a la Torre y hacer fotos hasta aburrir, unas dos horas. 
Un dato importante: las maletas/mochilas. En la estación de trenes hay guardaequipajes pero nosotros decidimos ir a la Torre con todo puesto ya que si vas a subir a la Torre ellos te guardan todo puesto que no se puede subir con nada más que la cámara y poco más. Nosotros hicimos todo el recorrido con las mochilas y genial, sin problemas. Pero llevábamos poca cosa porque siempre viajamos ligero.



Nos marchamos también caminando hasta la estación de trenes donde en las máquinas sacamos los billetes a Florencia, salen cada poco, por lo que no hay que preocuparse por anticipar nada. Y esa fue nuestra visita a Pisa.

Personalmente me encantó el recinto, la torre, etc... recomiendo subir pese al precio, es muy divertido ver el "mareo" al entrar y al subir, las campanas tocan cada 15 min y es una gozada oírlas desde arriba. Id con tranquilidad, se disfrutan más las cosas. 

PRESUPUESTO:
Lam Rossa: 1.20
Hotel Pisa Rooms For Rent (al lado de la estación de trenes): 29€ dos personas.
Subir a la Torre: 18€
Tren a Florencia: 9€


jueves, 13 de abril de 2017

5 lugares para comer en Florencia

1.Antico Vinaio


El mejor lugar de Florencia si quieres comer bueno y barato. 
l'Antico Vinaio no es más que una especie de charcutería donde hacen extraordinarios bocadillos para llevar. No hay donde comer, ni sentarse, aunque estando en Florencia a dos pasos de todo, eso no es un problema, coges el bocadillo y te sientas en cualquier plaza frente a la Santa Croce, o alrededor del Arno -que es el río que cruza Florencia-. Aunque mucha gente directamente se sienta en la acera y se come el bocata. Esta es una de las cosas que más me llamó la atención, -y me gustó de la ciudad-.

Es un lugar donde hay que ir sí o sí, y donde, probablemente tendréis que hacer cola, pese a que hay dos locales uno en frente de otro donde poder pedir tu focaccia. Nosotros fuimos para desayunar uno de sus bocadillos a las 10 de la mañana tras visitar los Uffizzi, pero estaba cerrado. Abrieron a las 10.30 más o menos. A las 11 cuando nos presentamos allí había algo de cola,10 o 12 personas en ambos locales. La cola, por eso, va rápido. Dentro hay una persona que cobra y mínimo 4 haciendo los bocadillos. 
Al día siguiente, para comer, fuimos a las 14.00 y la cola daba miedo en ambos locales. Aún así esperamos los 20 o 30 minutos como todos los demás y nos comimos nuestras focaccias.


Los bocadillos son grandes. Para desayunar con uno para los dos tuvimos suficiente.Para comer cogimos uno cada uno y nos sobró. 




Las focaccias las puedes pedir con los ingredientes que quieras, pero ellos tienen como una pequeña carta con los 5 bocadillos más pedidos, algunos galardonados y todo. Nosotros probamos tres distintos:
El primero La favolosa, riquísimo, con una especie de mortadela y unas salsas riquísimas.



El segundo fue el Boss que lleva jamón "serrano" y una salsa muy rara de tartufo. Nos gustó menos porque tenía menos salsas y por lo tanto era más seco el bocata. Seguramente me hubiese gustado más el Summer, que es lo mismo pero con Mozzarella. 
Para acabar, comimos l'Inferno, un bocata picante muy sabroso. 

Dirección: C/ De Neri, 74.

2.Gelateria De Neri

En la misma calle que el Antico Vinaio, tenemos esta heladería que es una de las más famosas de la ciudad. Pese a ello, son muy rápidos y no hay que hacer tanta cola como en otras heladerías. Lo mejor: los helados y el precio.



Tienen helados de 1,80€ que son bastantes grandes con dos sabores. De 2.50€ bastante más grandes. Hasta 4€ que debe de contener medio litro de helado. 
El de la foto es de pistacho y amareto, de 2,50. Buenísimo.

Mercado Central

Puesto que nuestro hotel estaba justo en frente, comimos, cenamos, y desayunamos en el mercado central. 
La parte de abajo del mercado es un mercado de comida como cualquiera que hay en España. Con productos típicos, fruta, viandas... no es nada grande, o por lo menos yo los he visto mucho más grandes. 
En el piso de arriba tenéis los lugares para comer -aunque abajo también hay algún local, pero cierra sobre las 14h- y cenar, puesto que la parte de arriba está abierta hasta las 00.00 de la noche. 
Los puestos de comidas recuerdan a las típicas caravanas americanas, puesto que son puestos muy limitados y especializados: por ejemplo el puesto de pasta hace 4 o 5 tipos de platos, de pizzas sólo ofrecen tres tipos, sin embargo no se necesita más. El hecho de que no ofrezcan demasiada variedad permite que estos lugares funcionen, puesto que todo lo cocinan enfrente tuyo. Para la bebida hay dos opciones: o traer la tuya propia - no muy lejos hay un carrefour express y algunas tiendas donde puedes comprar tu bebida- o en los puestos de bebidas del mercado. 


Hay siempre una persona en la caja que te cobra y te da un número, solo tienes que esperar a que digan tu número y listo. 

Las mesas son compartidas con todos los puestos, por lo que puedes picotear de aquí y de allá y buscar un lugar donde comer, de vez en cuando aparecen camareras que te ofrecen bebida, pero no es obligatorio consumirla del propio local. 




Está muy concurrido por lo que no es un lugar tranquilo. Es un lugar bullicioso, parecido a los restaurantes de supermercados de Asia, por ejemplo. 


En el mercado comimos el primer día mientras esperábamos a que prepararan nuestra habitación: 

Nos cogimos una pizza Margarita y un plato de pasta a la boloñesa. Todo bueno, rápido, y con un ambiente muy distinto a los típicos restaurantes italianos.



Para cenar volvimos a probar los gnocchis y una hamburguesa con patatas caseras.







Los precios son medios. El plato de pasta de 6 a 9€, las pizzas por el estilo.



Y para desayunar comimos en un puesto de la planta baja un bocadillo de carne cocida de ternera buenísimo también.


4. Oinos



Os hablo ahora del más típico local que hay en Florencia. Es el típico local con una terraza y mesas dentro del local, con precios medios, con comida normal. Suelen tener menús, aunque en este caso no había ninguno. 
Son locales sin encanto pero están por todos lados, y cuando no tienes demasiadas ganas de ir buscando es el lugar donde casi seguro acabarás. 
En este caso, el local, se llamaba Oinos, pero podría ser cualquier otro de la ciudad. 



Comimos un plato de pasta al pesto y un bistec a la Fiorentina de 300g, que estaba bastante bueno la verdad.
Nos trajeron pan -sin sal, típico de Florencia- y no nos lo cobraron. El cubierto costaba 1,50 por persona. Bastante bien. 



Unos 15€ persona. Si cogéis un primero y un segundo acaba saliendo bastante más caro. 
La comida no era escasa, pero tampoco abundante, normal. Después de esto nos entró perfectamente un helado de la Gelateria de Neri!!  Los postres en el propio restaurante costaban igual que los platos!!

5. Trattoria Da Guido

Este sí es un local con encanto. Muy cerca del mercado central, es una trattoria que tienen varios menús, tanto de día como de noche. Uno de ellos cuesta 20€ e incluye una copa de vino o agua, un bistec a la Florentina de 500g con una buena guarnición que mucha gente pedía. 






Nosotros comimos un menú de 15€ con un primero y un segundo: pedimos penne con gorgonzola y nueces, y espaguetti alla rabiata -los picantes- y de segundo pollo con verduras en tempura -tanto el pollo como las verduras, y lomo de cerdo con patatas. Todo muy bueno.
Las mesas, aunque muy juntas, tienen velita y dan a la trattoria un aspecto muy especial. 




miércoles, 12 de abril de 2017

Itinerario Pisa Florencia + Presupuesto



Fuimos a Pisa y Florencia aprovechando unos días de Semana Santa del 2017. Nuestra idea inicial era volar tanto la ida como la vuelta al aeropuerto de Bolonia, que está a una hora y algo de Florencia, puesto que los vuelos a la propia Florencia son bastante más caros. Pisa era una excursión desde Florencia que teniamos en mente. Finalmente, al reservar los billetes nos salía más a cuenta ir con Vueling a Pisa, y volver con Rynair por Bolonia. Así que finalmente, empezamos por Pisa y cambiaron ligeramente nuestros planes a mejor porque salía más barato así, aunque por contra tuvimos que pasar una noche en Pisan, que en realidad fue bueno. 

Finalmente, nuestro planning quedó así:

Viernes 7 de abril:

8:10 salida desde Barcelona con Vueling.
Llegada a las 21.45 a Pisa.
Cenamos en Pisa

Sábado 8 de abril: 

Mañana en Pisa
Tren a Florencia
Mercado Central de Florencia -comer-
Galleria della Accademia
Ponte Vecchio
Piazza Miquelangelo. 

Domingo 9 de abril:

Madrugamos para ir a los Uffizzi
Palazzo Pitti
Comer en Antico Vinaio
Santa Croce
Palazzo Vecchio

Lunes 10 de abril:

Catedral de Florencia
Paseo por la ciudad
Santa Maria Novella
Jardines di Boboli
Algunas compras

Martes 11 de abril

03.50 salida bus hacia Bolonia
05:10 llegada al aeropuerto de Bolonia
08.50 vuelo Rynair a Barcelona
10.35 llegada a Barcelona




Presupuesto viaje:
Ida con Vueling BCN-PISA: 99€
Bus Lam Rossa Aeropuerto-Hotel: 1.20€
Hotel Pisa: Rooms For Rent 29€ dos personas
Subir Torre Pisa: 18€
Tren Pisa-Florencia: 9€
Hotel Florencia: Regina 4 noches: 151€ dos personas
Galleria Della Academia: 11.50€
Uffizzi: 12.50€
Palazzo Pitti: Palatino y Museo moderno: 12.50
Santa Croce: 7€ (no entramos)
Giardino di Boboli: 7€ (no fuimos)
Palazzo Vecchio: 10€
Santa Maria Novella: 5€ (no entramos)
Catedral Florencia: Battisterio, Campanile, Subida Cúpula y Museo: 15€
Florencia-Bolonia Bus Apennino: 20€
Vuelta Rynair BOLONIA-BCN: 39€
En las comidas y cenas no pagamos nunca más de 15€, normalmente bastante menos.

Total: 356€ por persona contando varias entradas a lugares que finalmente no fuimos. 
Sumad 100e más en comida si sois de aprovechas supers para desayunar, y comer en lugares low cost como estos.

Datos de interés:
  • Visitamos Florencia mucho más rápido de lo que inicialmente teníamos previsto, es pequeña, todo está cerca, por lo que cojáis donde cojáis el hotel estará bien, porque estará cerca. Ídem de Pisa.
  • Dos días para Florencia yendo tranquilos son suficientes para ver la ciudad y los principales museos. 
  • Es una ciudad muy sencilla de recorrer con un simple mapa. Imposible perderse porque hay muchos puntos importantes de referencia. 
  • Es una ciudad cara, no tanto por la comida o el alojamiento -que no dejan de ser los precios habituales en Europa- sino por la cantidad de lugares de pago que hay. Todo es de pago y nada baja de 10 euros y no tardas en recorrer cada lugar más de dos horas yendo con mucha tranquilidad. 
  • Fuimos en Semana Santa y la ciudad estaba bastante llena de turistas, sin embargo, todo está bastante bien organizado y aunque hicimos cola en todas partes, no fueron más de 30 min en ningún lugar. 
  • No reservamos en los Uffizzi, nos parece un robo pagar 4€ más por reservar -que no significa no hacer cola-, fuimos pronto y ningún problema, entramos en 5 min.
  • No hay ningún tipo de billete reducido para carnets ISIC, ITIC y similares. Sólo hay descuentos para  menores de 25 años de ciudades Europeas.


domingo, 19 de marzo de 2017

Pizzeria Dal Nonno

¡Celíacos estáis de suerte!

Si pasáis un día por Castelldefels y habéis dedicado una mañana de compras en el centro comercial Ánec Blau -abierto los domingos- o en el centro de oportunidades del Corte Inglés -también abierto los domingos con gangas muy buenas, especialmente en período postrebajas; aunque todo el año hay muchas ofertas- y os estáis planteando donde comer hay una pizzeria donde prácticamente la carta entera es apta para celíacos, con un suplemento de 1,50 por plato. Además también tienen productos marcados para gente con alergia a la lactosa.


Las pizzas son de masa fina, y muy muy buenas. Hechas en horno de piedra, se nota la calidad. Los precios rondan de los 7.90 a las 10 euros la mayoría, según los ingredientes, también podéis hacer la pizza al gusto. Los días de cada día tienen menús a 17 euros.
Nosotras nos comimos una pizza entera cada una y una bebida, 12.50€ cada una.


Hay que tener cuidado con el aforo, porque a pesar de no ser pequeño se llena rápidamente, además la mayoría de personas tienen reserva previa. Nosotras fuimos muy muy pronto, a las 12.30 y gracias a eso nos dieron mesa, sino nos hubiéramos quedado sin.
Aunque también podéis llevaros las pizzas a casa. 
Además de pizzas tienen otras comidas italianas, como rissotto, pastas, carnes empanadas...

Si estáis en el centro comercial, solo tenéis que ir dirección al pueblo por el puente que cruza el tren, además si vais en primavera o otoño tienen una excelente terraza donde también se come muy bien. 

Dirección: Av. Constitución, 60.
El teléfono es el 936452109.







miércoles, 8 de marzo de 2017

Itinerario Girona


Un viaje por Gerona en invierno dista mucho del itinerario que podríais hacer en primavera y verano simplemente por las horas de luz que te permiten estar al aire libre paseando por ejemplo por los volcanes de la fageda. 
Hay lugares que pueden aprovecharse a verlos de noche, como la propia capital, pero otros indiscutiblemente exigen de horas de luz. 
Nuestro itinerario fue el siguiente durmiendo en Roses las dos noches:





Llegamos a Girona capital a media tarde, por lo que vimos la ciudad al aterdecer y ya de noche. El clima nos acompañó bastante, pese a ser principios de Enero bien abrigados no tubimos problemas.
Esa misma tarde ya cenamos en Roses.
Por la mañana temprano fuimos los primeros en llegar al monasterio de Sant Pere de Rodes, muy recomendable. No tubimos ningún problema para aparcar por ser tan temprano, aunque allí arriba no es que haya demasiado aparcamiento.
En el cap de Creus ídem, pese a ir a media mañana no había demasiada gente por lo que pudimos llegar fácilmente en coche y aparcar allí tranquilamente.
En Roses pasamos la tarde en la playa, de compras y viendo los monumentos megalíticos.
El último día lo pasamos en el coche de pueblo en pueblo haciendo las debidas paradas en cada uno de ellos: rodeamos el lago de Banyoles con el coche -hacían competiciones en barca y deslucía mucho, la verdad-; Besalú en media hora está visto. En Castellfollit pasamos algo más de una hora en hacer el recorrido desde la carretera al pueblo por el puente.
Y la ruta de la fageda la hicimos pasado el mediodía, escogimos una no muy larga y para casa...

domingo, 19 de febrero de 2017

Castellfollit de la Roca


En invierno también se puede viajar. Los paisajes son muy diferentes, todo está menos masificado, llegar al hotel y poder disfrutar de un spa o una bañera caliente no tiene precio... sin embargo, también tiene sus inconvenientes, para mí el peor: las horas de luz. El día se acaba muy pronto y hay cosas que hay que hacer sí o sí con luz, aunque este inconveniente se puede volver ventaja si sabemos disfrutar de la noche de los pueblos, las ciudades iluminadas, o los ríos reflejando los adornos navideños. 

Una de las tareas pendientes que tenía en nuestra ruta por Girona era el pueblo de Castellfollit de la Roca un pueblo muy particular puesto que sus casas estan construídas sobre un risco basáltico en forma de línea recta sobre el río Fluviá. El risco tiene una altura de unos 50 metros, por lo que básicamente, parece un acantilado sin costa, precioso. Además las casas, todas marrones se integran espectacularmente con el paisaje y la iglesia de San Salvador construída justo en una punta del pueblo, deja ver unas espectaculares vistas. 

Existe una ruta circular de aproximadamente 50 minutos que da la vuelta al pueblo y baja rodeando el risco. Nosotros no supimos hacerla circular, porque había un espacia donde se perdía el camino y acabamos haciendo una ida y vuelta por el mismo sitio, por donde venían los pocos turistas que nos encontramos. 
Hay un restaurante-parador en la carretera donde inicialmente teníamos la idea de aparcar, pero al llegar allí había un cartel muy clarito que decía parking reservado a clientes. Normal. Así que seguimos un poco más abajo y encontramos una especie de pequeño aparcamiento al lado de una parada de Bus justo en la carretera y allí dejamos el coche, para seguir ruta a pie por un espacio urbano que da al rio y por donde cruza un puente desde donde las fotos son espectaculares, justo debajo del risco. A partir de ahí seguimos el puente y subimos por un caminito en medio de la naturaleza hacia el pueblo por la parte de atrás del risco.  En el pueblo no hay apenas nada. La iglesia de San Salvador y el mirador y algún punto más desde donde se ve vertiginosamente el río  y algún puente derruido al fondo. 
No creo que tardásemos más de 50 minutos en verlo. Fue una visita fugaz, pero muy bonita.